En 1983, Franck Muller presentó su primer reloj, el Tourbillon, en una caja rectangular. Este reloj fue un hito en la historia de la relojería, ya que combinaba una complicación tradicionalmente reservada para los relojes de bolsillo con un diseño contemporáneo y moderno.
El Tourbillon fue el inicio de una serie de innovaciones y desarrollos que le valieron a Franck Muller el apodo de «Master of Complications».
En 1991, Franck Muller y el empresario Vartan Sirmakes unieron fuerzas para fundar la marca Franck Muller. Juntos, aparecieron la compañía en Genthod, una localidad cerca de Ginebra, donde construyeron la «Watchland», un espacio dedicado a la fabricación y producción de relojes Franck Muller. Desde entonces, la marca ha lanzado una serie de relojes innovadores y complicados, como el Crazy Hours, el Aeternitas Mega y el Giga Tourbillon.
El éxito de la marca Franck Muller no solo se debe a la creatividad y maestría técnica de su fundador, sino también a la visión empresarial de Vartan Sirmakes. Juntos, han logrado posicionar a Franck Muller como una de las marcas de relojes de lujo más reconocidas y respetadas en el mundo.